Es la mirada una enorme ceguera que merodea entre la sombra, es el miedo que habla desde su oscura puerta, en el día nos persigue una culpa, un demonio que en la noche aparece.
OjO
Basta un ojo para ver las gafas olvidadas del poeta.
Sombra
Yace el cuerpo de un albino.
En el suelo la gente lo rodea:
señala al sol como el culpable.
Lentes de sol
Escuchemos al albino en conversación con el sol. Admirémosles sentados a la mesa. Tanto tiempo sin verse y ahora juntos. Uno frente al otro. Sorprendido el albino por mirar los ojos que aún le temen.
Luis Lugo (Ciudad de México, 1985) cursó el diplomado en la Escuela de Escritores de la SOGEM. Actualmente estudia sociología en la UAM. Ha cursado diversos talleres de poesía impartidos por Antonio Deltoro, Aurelio Asiain, José Vicente Anaya y Rocío Cerón. Ha sido becario del programa El Bosque sin Senderos del Centro de las Artes de San Agustín, Oaxaca (2006-2007) y de Letras a la Obra del Centro de Lectura Condesa (2007-2008).