
“La relación que mantengo con el periodismo cultural viene de antiguo. En sus inicios, todos hemos pasado por ahí, fue la de lector y, en mi caso, la de lector asiduo”
, nos cuenta Federico Patán en el prólogo de
Crónicas Literarias ¿Quién es Federico Patán?¿Qué son estas crónicas? ¿Qué es lo que nos quieren decir?
Federico Patán (Asturias, 1937) de nacionalidad mexicana, pertenece a la segunda generación de escritores hispanomexicanos. Es amante de la literatura (con cierta predilección por la Inglesa, según nos cuenta). Traductor de Shakespeare, Twain, Hawthorne entre otros. Empezó siendo poeta, pero piensa que
“hay temas literarios que no encajan en la geografía del verso” así, comenzó su aventura en la novela con gran éxito:
Último Exilio (1986), que ganó el Premio Xavier Villaurrutia.
Crónicas Literarias está compuesto por diversos artículos periodísticos que se escribieron de 1993 a 2000 para el suplemento
Sábado del periódico
Unomásuno (al que Federico ingresó en 1980). Desde la fecha de nacimiento de las crónicas, hasta las de su muerte, se escribieron unas 300 de temática variada. Un número considerable abordaba la literatura; así nació esta recopilación
.
Es una lectura disfrutable, ágil e inteligente. Mi experiencia fue bastante gratificante, mientras leía
Crónicas Literarias tomé nota de no menos 30 escritores a los que debo leer (algún día). Por ejemplo, la crónica “Yasunari Kawabata”. Temo generalizar más de lo que debería, pero nuestra visión eurocéntrica del mundo nos ha orillado a no estar tan al pendiente de la literatura japonesa. Cosa que Patán reconoce cuando dice “No es la japonesa literatura que haya frecuentado. La conocí ya tarde en mi trayectoria de lector y sólo de vez en cuando la toco, generalmente por razones de trabajo”
. Aún así, y con su lejanía con la literatura Japonesa, Patán nos habla de unos autores japoneses con los que ha disfrutado. También nos habla de alemanes, norteamericanos, franceses, ingleses y, por supuesto, mexicanos.
Al ser mexicano y gran conocedor de los ingleses, son éstos dos quienes más llaman su atención. Más que mexicanos, hispanos. Patán nos habla de Fuentes, Borges, Bioy Casares, Cortázar, Alberti, Machado, Rulfo y muchos más.
Crónicas Literarias es un gran comienzo para todo lector que quiera adentrarse más allá de lo que tiene.
Cada parte del libro es disfrutable. Conviven datos biográficos de Patán, obituarios, charlas y primeros encuentros. Muchos otros que tocan la relación “cine/literatura”, tenemos “Francis Scott Fitzgerald y Hollywood”, donde dice que Hollywood tiene una deuda profunda con Fitzgerald, dada su relación con el cine. Esto fue escrito entre 1993 y 2000. Federico Patán no logró escribir (y posiblemente tampoco ver) la adaptación cinematográfica
The Curious Case Of Benjamin Button (2008)
. ¿Logró Hollywood hacerle justicia a Fitzgerald? Creo que no.
Con la cantidad de obituarios y conmemoraciones que hace Patán en el libro, es de extrañar que no se dedique en ninguna de las crónicas al único premio Nobel de Literatura mexicano, Octavio Paz. Si a Patán no le caía bien es totalmente entendible. Quizá es la única crónica “crucial” que le falta al libro.
Podemos hacer tres analogías.
Crónicas Literarias es:
1) Un gran desfile literario con Patán como el presentador,
2) una guía de lecturas que, seguramente, pocos conocen, y,
3) un mapa trazado por Patán para adentrarnos en él y sus propias experiencias literarias.
Son tres lecturas del mismo libro. Y tres lecturas que son útiles para cualquier lector amateur y profesional.